Zhurong salió de su plataforma de aterrizaje el sábado para empezar a explorar el planeta rojo durante tres meses.
Una de las imágenes enviadas por el rover Zhurong días después del aterrizaje en Marte – CNSA
China ya se pasea por Marte. El pasado sábado, una semana después de posarse en el planeta rojo, el rover Zhurong abandonó su plataforma de aterrizaje, se deslizó por la rampa de salida y comenzó a explorar los alrededores, una tarea que le llevará al menos tres meses. Con este recorrido, el país asiático se confirma como el segundo tras EE.UU. en lograr algo semejante.
El vehículo explorador aterrizó en Marte el 15 de mayo tras viajar a bordo de la sonda Tianwen-1, lanzada por la Administración Espacial China (CNSA) en julio de 2020 desde la base Wenchang, en la isla meridional de Hainan. La maniobra supuso un hito en el programa espacial chino. El módulo llegó a una vasta llanura de lava en el hemisferio norte del planeta conocida como Utopia Planitia, el objetivo planificado. Unos días después, Zhurong enviaba sus primeras fotos del paisaje marciano, en las que podía contemplarse una llanura limpia y despejada, con pocas piedras grandes que puedan entorpecer su camino.
Zhurong, bautizado en honor a un mítico dios chino del fuego, tiene seis ruedas y está impulsado por energía solar. Con 240 kilos de peso, lleva a bordo un conjunto de instrumentos para explorar el entorno, como dos cámaras en el mástil para tomar imágenes de rocas cercanas y planificar sus movimientos, una cámara multiespectral para identificar los minerales que componen el terreno, un radar de penetración terrestre, un detector de campo magnético, una estación meteorológica y un instrumento para medir la composición química del polvo y las rocas. Todos ellos le ayudarán a recopilar datos geológicos y realizar un mapa del entorno. Lo que aprenda servirá a la agencia china para planificar futuras misiones más ambiciosas.
Demostración tecnológica
Pero el principal objetivo, que es el de una demostración de tecnología, ha sido conseguido con creces. China ya ha enviado astronautas al espacio, sondas a la Luna y ha hecho aterrizar un rover en Marte, la misión más prestigiosa en la competición internacional por el dominio del espacio. Antes que el país asiático, solo Estados Unidos y Rusia habían logrado poner artefactos en suelo marciano, y solo el primero ha operado vehículos exploradores en la superficie.
Varios intentos estadounidenses, rusos y europeos de aterrizar en Marte fracasaron. El último en 2016, cuando la misión Schiaparelli de la Agencia Espacial Europea (ESA) se estrelló en la superficie marciana a causa de un fallo en los sistemas de navegación. La última llegada exitosa que ha precedido a Zhurong se produjo en febrero, cuando la NASA hizo aterrizar su rover más avanzado, el Perseverance, que desde entonces explora el planeta.
Fuente: ABC