Recordando el vuelo de las perras Belka y Strelka

Muchos recuerdan hoy los hocicos simpáticos de estos perros. A principios de los sesenta sus fotografías fueron publicadas en todas las partes del mundo. Hace 50 años el mundo supo del primer vuelo de seres vivos al espacio, que finalizó exitosamente. Este vuelo de las perras fue un paso muy importante hacia el primer vuelo del hombre al espacio: el de Yuri Gagarin.

El lanzamiento de la nave Vostok fue realizado el 19 de agosto de 1960 desde el cosmódromo de Baikonur. Junto con Belka y Strelka a bordo del cohete volaban cuatro ratas blancas, 40 ratones blancos y negros, insectos, hongos, plantas, y granos de trigo, de maíz y de guisantes necesarios para el estudio del impacto de la radiación en los organismos terrestres.

Transcurridas entre cuatro y seis vueltas alrededor del planeta, Belka se empezó a mostrar muy inquieta. Este hecho influyó en la elección de la distancia del primer vuelo del ser humano: sólo una vuelta alrededor de la Tierra. Durante el vuelo las perras llevaban puestos unos trajes especiales de colores rojo y verde. La longitud del vuelo fue de 700.000 kilómetros.

Muchos recuerdan hoy los hocicos simpáticos de estos perros. A principios de los sesenta sus fotografías fueron publicadas en todas las partes del mundo. Hace 50 años el mundo supo del primer vuelo de seres vivos al espacio, que finalizó exitosamente. Este vuelo de las perras fue un paso muy importante hacia el primer vuelo del hombre al espacio: el de Yuri Gagarin.

El lanzamiento de la nave Vostok fue realizado el 19 de agosto de 1960 desde el cosmódromo de Baikonur. Junto con Belka y Strelka a bordo del cohete volaban cuatro ratas blancas, 40 ratones blancos y negros, insectos, hongos, plantas, y granos de trigo, de maíz y de guisantes necesarios para el estudio del impacto de la radiación en los organismos terrestres.

Transcurridas entre cuatro y seis vueltas alrededor del planeta, Belka se empezó a mostrar muy inquieta. Este hecho influyó en la elección de la distancia del primer vuelo del ser humano: sólo una vuelta alrededor de la Tierra. Durante el vuelo las perras llevaban puestos unos trajes especiales de colores rojo y verde. La longitud del vuelo fue de 700.000 kilómetros.

El aterrizaje se produjo el 20 de agosto de 1960 en un prado plano. Los primeros testigos de este acontecimiento histórico fueron los campesinos que trabajaban en un campo cercano. Ellos rodearon la cápsula cósmica, que les pareció un huésped enigmático del espacio, y la miraron con curiosidad. Alguno leyó una inscripción en la cápsula que decía que se informara del hallazgo en la dirección indicada, aunque no hizo falta hacerlo porque pronto llegó un avión de supervisión con especialistas a bordo.

Cuando los científicos abrieron las escotillas, Belka y Strelka se liberaron de la cápsula. Los animales, que pasaron muy bien el aterrizaje en la Tierra, se alegraron de estar al aire libre e hicieron mimos a las personas que les dieron la bienvenida, ladrando alegremente.

Los periódicos soviéticos publicaron las imágenes de estas simpáticas perras sin raza recibidas desde el espacio (se informó, asimismo, que ésta era la primera vez que se transmitía desde el espacio imágenes de objetos en movimiento). La noticia sobre el vuelo conmovió a todos loa ciudadanos del país. Los diarios y revistas publicaron cartas de gente común y corriente que expresaba su orgullo por el logro cósmico. Los poetas escribían versos, como en uno de ellos que decía "la tierra soviética ahora se convirtió en una orilla del Universo".

La prensa extranjera también se entusiasmó con el vuelo de Belka y Strelka. Todo el mundo conocía a las dos perras que habían dado varias vueltas alrededor de la Tierra. "El último logro de los rusos muestra con claridad que tanto por el tamaño de su nave como por la técnica del vuelo y del regreso a la Tierra los rusos van delante de EE. UU.", afirmó aquellos días el rotativo The New York Times. "¡Ahora llegó el tiempo para que el hombre vuele al espacio!", fue el lema de otras publicaciones de la prensa mundial.

Tras el vuelo, tanto Belka como Strelka vivieron varios años, hasta ser viejas. Strelka tuvo seis cachorros, uno de los cuales  fue enviado como regalo por orden del mandatario soviético Nikita Jruschov a Caroline Kennedy, hija del presidente estadounidense John Kennedy. Los cuerpos disecados de los perros están en el Museo del Cosmonauta de Moscú. Posteriormente perros, monos y otros animales enviados al espacio en satélites y estaciones orbitales ayudaron a salvar a los cosmonautas del impacto nocivo de las condiciones de un vuelo cósmico.

Pero fueron Belka y Strelka las que se convirtieron en una verdadera leyenda de la historia de la exploración del espacio. A principios de 2010 se estrenó en Moscú la película de dibujos animados sobre los primeros animales que sobrevivieron a un vuelo espacial. Se envió unos fragmentos de 'Belka y Strelka. Los perros estelares' a la Estación Espacial Internacional "como ayuda psicológica para el equipo internacional".

Fuente: RT.com

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