La estación espacial soviética Salyut 7 cayo en 1991 debido a una tormenta solar
Sobre el posible impacto de otro satélite en la Tierra la semana próxima, el secretario de la Asociación Entrerriana de Astronomía, Mariano Peter, explicó que la caída de estos elementos se registrará hasta 2014, ya que “estamos iniciando el máximo de actividad solar, que se extenderá unos años más”, e indicó que el fenómeno hace que “la atmósfera se expanda”, lo que provoca que “los dispositivos pierdan velocidad”.
En diálogo con esta Agencia y sobre el posible impacto de otro satélite en la Tierra la semana próxima, Peter explicó que “estamos iniciando el ciclo que se conoce como máximo solar, que dura 11 años y el pico de esta actividad se registrará hasta 2014”.
La estación espacial soviética Salyut 7 cayo en 1991 debido a una tormenta solar
Sobre el posible impacto de otro satélite en la Tierra la semana próxima, el secretario de la Asociación Entrerriana de Astronomía, Mariano Peter, explicó que la caída de estos elementos se registrará hasta 2014, ya que “estamos iniciando el máximo de actividad solar, que se extenderá unos años más”, e indicó que el fenómeno hace que “la atmósfera se expanda”, lo que provoca que “los dispositivos pierdan velocidad”.
En diálogo con esta Agencia y sobre el posible impacto de otro satélite en la Tierra la semana próxima, Peter explicó que “estamos iniciando el ciclo que se conoce como máximo solar, que dura 11 años y el pico de esta actividad se registrará hasta 2014”.
Por esta razón, “es probable que vayan cayendo varios satélites de acá a unos años más”, expresó y agregó que “por la ráfaga solar, la atmósfera se expande” y, “al haber satélites próximos a caer en orbita baja, los dispositivos pierden velocidad; eso es lo que le paso al Uars semanas atrás”.
El especialista detalló cómo puede afectar a la Tierra la caída de satélites y manifestó que una de las preocupaciones “es que caiga en cualquier lado”, cuestión que “es muy difícil”, ya que “la superficie poblada es ínfima en comparación a las masas oceánicas o deshabitadas en los continentes”. De todos modos, aclaró que “no es imposible”.
Además, “hay que evaluar el peligro que pueda generar al caer en un lugar poblado”, porque “los elementos espaciales pueden tener radiación o restos con sustancias tóxicas”. Incluso “suelen tener energía nuclear y el combustible es tóxico”.
De todos modos, Peter indicó a AIM que después de esta fecha, “se pasará de una actividad máxima a una estable, donde no hay problemas de este tipo”.
En una nota a AIM, el representante de la Asociación advirtió que para 2012, “se prevén tormentas solares de gran magnitud, que podrían ocasionar una catástrofe tremenda, ya que quedarían inutilizados los transformadores de energía eléctrica y se tardaría varias décadas en poder solucionar el problema”, y señaló que “estamos ingresando en un período de gran actividad que se produce cada 11 años”.
Fuente: AIM Digital, entrevista a Mariano Peter – AEA