Los investigadores descubren que lleva ya tres años orbitando nuestro planeta, pero podría estar ya en vías de escapar al espacio.
La Tierra acaba de capturar una nueva luna. Es pequeña, poco mayor que un automóvil, pero según los astrónomos ha entrado hace muy poco a formar parte de la colección de satélites naturales que acompañan a nuestro planeta.
El pasado 18 de febrero, en efecto, un equipo de investigadores del Catalina Sky Survey, en Arizona, divisó un objeto oscuro moviéndose rápidamente a través del cielo. Durante los días siguientes, otros seis observatorios de todo el mundo observaron también el misterioso objeto, designado como 2020 CD3, y calcularon su órbita, confirmando que lleva por lo menos tres años unido gravitacionalmente a la Tierra.