Durante el mes de mayo, Marte se encontrará en oposición, es decir que las posiciones del Sol, la Tierra y Marte formarán una línea recta en el espacio. Al estar más cerca del Sol que el planeta rojo, ese será el momento en que nuestro planeta sobrepase a Marte en su órbita, y pocos días después se producirá el acercamiento máximo entre ambos planetas.
Nuestro planeta, al estar más cerca del Sol, tiene un período orbital más corto que el de Marte, por lo que se desplaza más rápido y sobrepasa al planeta rojo en su órbita, pasando entre Marte y el Sol aproximadamente cada 780 días. Cada vez que esto sucede, Marte se ubica en la dirección opuesta al Sol en el firmamento terrestre. Este fenómeno, denominado oposición, hace que Marte se acerque a la Tierra cada 26 meses.
Sin embargo, debido a que las órbitas del planeta rojo y la de nuestro planeta son elípticas y no perfectamente circulares, y además los planos orbitales de ambos están ligeramente inclinados, no todas las oposiciones son iguales. Durante los últimos miles de años, la órbita de Marte se ha ido haciendo más excéntrica debido a la influencia gravitacional de otros planetas, particularmente Júpiter. Cada siglo, Marte se acerca más al Sol durante su perihelio, y se aleja más del Sol durante su afelio.
Las oposiciones de Marte varían a lo largo de un ciclo periódico de aproximadamente 15,8 años, durante el cual se producen tres o cuatro oposiciones “afélicas”, en las cuales el planeta rojo se encuentra cerca de su afelio, y tres oposiciones “perihélicas” consecutivas. Estas últimas resultan más favorables para los observadores terrestres, ya que en ellas Marte se encuentra cerca de su perihelio y alcanza una menor distancia mínima con la Tierra.
La oposición de Marte en 2016 es considerada “transicional”, ya que el planeta se encuentra a una distancia intermedia entre su afelio, que ocurrió en noviembre de 2015, y su perihelio del próximo mes de octubre.
La gran oposición de Marte en 2003
El 27 de agosto de 2003, un día antes de su oposición, Marte pasó a 55.758.006 kilómetros de la Tierra, en la aproximación más cercana de los últimos 60.000 años.
El astrónomo Aldo Vitagliano, un experto en el cálculo de órbitas planetarias de la Universidad de Nápoles, Italia, realizó una integración numérica simultánea de los movimientos de los planetas, nuestra Luna y los asteroides de mayor masa. Al analizar los resultados, confirmó que la última vez que Marte se acercó a una distancia menor a la de 2003 fue en el año 57.617 antes de Cristo, cuando el planeta rojo pasó a unos 55,718 millones de kilómetros de la Tierra. Esa distancia mínima no volverá a repetirse hasta el 28 de agosto de 2287.
¿Marte se verá del tamaño de la Luna?
Lamentablemente, desde 2003 esta leyenda urbana no deja de viralizarse a través del e-mail y las redes sociales cada vez que el planeta rojo se acerca a la Tierra. Lo cierto es que en el momento de máxima aproximación a nuestro planeta, Marte tendrá un diámetro angular similar al de Saturno en los cielos terrestres, por lo que a ojo desnudo será visible como una estrella brillante.
Por otro lado, es imposible que Marte se vea de un tamaño igual al de la Luna. ¡Si eso fuera cierto, estaríamos en gravísimos problemas debido a la atracción gravitacional entre la Tierra, Marte y la Luna!
Entonces… ¿qué podremos ver realmente?
Los observadores del hemisferio sur terrestre tendremos la mejor vista de Marte durante esta oposición, ya que el planeta rojo estará ubicado unos 21 grados al sur del ecuador celeste.
En esta ocasión, Marte estará en oposición el día 22 de mayo de 2016 a las 11:11 (TU). En ese momento estará en la constelación de Scorpius, brillando con un color notablemente anaranjado-rojizo y una magnitud de -2.1 sobre el horizonte este al anochecer.
Ocho días más tarde, el 30 de mayo a las 21:36 (TU), se dará la máxima aproximación a la Tierra, a 75.281.058 kilómetros (0,5032 UA) de distancia. En ese momento, el disco de Marte alcanzará un diámetro aparente de 18,6 segundos de arco en los telescopios terrestres. Este tamaño angular es casi 7 segundos de arco más pequeño que el que alcanzó el planeta rojo durante la gran oposición de 2003, pero aun así será el mayor desde 2005.
El hemisferio norte de Marte estará atravesando el final del verano, por lo que la región polar norte será visible desde nuestro planeta, pero se irá ocultando lentamente por detrás de Marte: el solsticio de verano en el hemisferio norte de Marte ocurrió en enero, y el equinoccio de otoño ocurrirá en julio.
Con un telescopio de más de 10 centímetros de diámetro podrán observarse las mayores variaciones de albedo, correspondientes a características geográficas como Syrtis Major, la planicie de Hellas, Solis Lacus, y el casquete polar norte, que estará inclinado unos 12° hacia la Tierra. Hellas es una cuenca de impacto redonda y brillante, y a veces es confundida con el casquete polar.
Con un telescopio de más de 15 centímetros de diámetro podrán resolverse distintos tipos de nubes en la atmósfera de Marte. Las nubes discretas, por ejemplo, permanecen fijas en un área mientras el planeta rota sobre su eje; la mayoría pueden observarse en el hemisferio norte marciano.
A pesar de la expectativa que la oposición de Marte genera en la comunidad de astrónomos aficionados, los profesionales no prestarán demasiada atención al evento. Esto se debe a que la observación de Marte mediante los telescopios más grandes durante su máximo acercamiento no ofrece demasiadas ventajas en relación a las imágenes obtenidas en otros pasajes de su órbita.
Observando a Marte de cerca
La exploración robótica del planeta rojo atraviesa un período de actividad sin precedentes. Actualmente hay cinco sondas espaciales activas en órbita alrededor de Marte: las estadounidenses Mars Odissey, MRO y MAVEN, la europea Mars Express y la india Mangalyaan (MOM). Además, hay dos rovers de la NASA recorriendo la superficie del planeta rojo: Opportunity y Curiosity.
Los meses anteriores a las oposiciones proveen una oportunidad favorable para enviar naves hacia Marte, ya que en ese momento ambos planetas se están acercando, y la inserción de una sonda en su trayectoria hacia el planeta rojo requiere de menos combustible.
La ESA (Agencia Espacial Europea) lanzó en marzo la misión ExoMars 2016, que se encuentra en camino hacia Marte, e incluye al orbitador ExoMars TGO y la plataforma de aterrizaje Schiaparelli EDM. La NASA también planeaba lanzar su misión InSight en marzo, pero debido a dificultades técnicas con el principal instrumento científico de la sonda, el lanzamiento fue pospuesto hasta la próxima oposición en 2018.
Fuente: Ricardo J. Tomhé – Astronomía On Line