Misterios Astronómicos: La Estrella de Belén

Por Mariano Andrés Peter 

La imágen más popular de la la Estrella de Belén

Si bien existen una variedad de enigmas astronómicos, ninguno ha sido objeto de tantos estudios o de tantas especulaciones a lo largo de los siglos como la famosa y enigmática Estrella de Belén.
¿Qué fue la Estrella de Belén, mito, milagro o hecho científico?

Veamos:

Los meteoros brillantes se llaman bólidos

Bólidos: Son meteoros muy luminosos. Se originan cuando un fragmento de material espacial ingresa a la atmósfera a una velocidad de entre 50 mil a 100 mil km / h. Seguramente los Magos observaron muchos bólidos durante sus vidas, miles de ellos caen por año. Son muy comunes. Además son demasiado efímeros. La Estrella de Belén por el contrario, tenía un brillo intenso y sostenido. Se vio por varios días. Los bólidos entonces, están descartados como explicación de la Estrella de Belén.

 

 Los cometas vienen de los confines del sistema solar

Cometas: Son escombros, reliquias de la formación del Sistema Solar, hace 4.600 millones de años. Están constituidos básicamente de hielo. Cuando ingresan a la parte interior del Sistema Solar, el calor del Sol vuelve inestable al hielo y se produce una especie de efervescencia llamada sublimación. El gas y el polvo salen expulsados a gran velocidad y así se forman la coma y la típica cauda del cometa. De esta manera, el cometa se hace visible ocupando, en muchos casos, un sector muy amplio en el firmamento. Pueden tener un brillo intenso y durar por varios días. Los cometas reúnen todas las condiciones para explicar la naturaleza de la Estrella de Belén. Muchos científicos así lo creen.
El famoso pintor Giotto también lo creyó. Esa fue la razón para colocar la imagen del cometa Halley en su famosa pintura del nacimiento de Cristo. En realidad el Halley pasó en el año once AC, fuera del lapso de tiempo que tenemos que analizar. Hubo si un cometa muy brillante que fue registrado en el año cinco AC y que se observo durante setenta días. Pero más allá de eso, hay un problema con la hipótesis del cometa. En astrología, los cometas no son considerados señales de buen augurio, más bien son todo lo contrario.
Se los considera portadores de desgracias y penurias, por lo tanto los Magos jamás hubieran asociado la aparición de un cometa con un evento tan significativo como el nacimiento del Mesías. Tampoco se hubieran aventurado a realizar una travesía por el desierto.
Por este motivo, los cometas quedan también descartados. Ninguno de ellos fue la Estrella de Belén.

 

Las supernovas son las explosiones más poderosas del Universo

Supernovas: Son explosiones titánicas. Se producen cuando una estrella masiva (de diez a cien veces la masa del Sol) estalla. El brillo de una explosión supernova iguala al de toda la galaxia que la contiene. Pueden ser vistas a plena luz del día y con su brillo, en algunos casos, se podría leer durante la noche. Tienen una duración de varios días. Desafortunadamente no se registró ninguna supernova en el período de tiempo en cuestión. La Estrella de Belén, nos sigue evadiendo.

 

Imágen del estallido de una nova

Novas: Son explosiones menos espectaculares que las supernovas. Se originan cuando una estrella enana blanca que orbita alrededor de una compañera gigante roja, comienza a absorverle material estelar. Por consiguiente al cabo de un tiempo se produce una especie de “indigestión estelar”, la enana blanca explota. Eso es una nova. Se registró una cerca de la estrella Altair, en la constelación del Águila en el año cinco AC.
Si bien tenía el brillo y la duración suficiente para ser la esquiva Estrella de Belén, tiene un obstáculo insalvable. En astrología, las novas no tienen significado alguno. Los Magos seguramente la observaron, la admiraron pero no significó nada especial. No la consideraron una señal inminente del nacimiento del Mesías.

 

Venus al atardecer

Venus: Es el planeta más brillante. Después del Sol y la Luna, Venus es el objeto más brillante del firmamento. Se lo puede ver inclusive de día. Tiene el brillo y la duración necesarios para ser la Estrella de Belén, pero una vez más, no tiene un significado astrológico. No hubiera sido considerado una señal inequívoca del advenimiento de un nuevo Rey de los judíos. Por lo tanto, continuamos la búsqueda.

 

Conjunción planetaria de Júpiter y Saturno

Conjunciones: Son alineamientos de cuerpos celestes, generalmente planetas. En una conjunción planetaria, dos o más planetas se unen en forma aparente en el cielo lo que multiplica sus brillos. No son fenómenos comunes pero tampoco son extraños, ocurren de vez en cuando.
Las conjunciones, a diferencia de los demás fenómenos celestes, tienen un significado astrológico muy importante. Presagian buenas noticias.
Hubo dos conjunciones importantes por aquellos años. Una de ellas fue en el año dos AC. Venus y Júpiter se unieron, produciendo un brillo sumamente intenso ya que se trata de los dos planetas más brillantes del cielo nocturno. Desafortunadamente, el año dos AC es demasiado tarde para nuestra búsqueda.
La otra conjunción se dio en el año siete AC. Júpiter y Saturno se unieron tres veces en un período de varios meses.
El veintisiete de Mayo se produjo el primer alineamiento, justo en la constelación de Piscis que para los astrólogos representa a los judíos. Esta fue la señal que anunciaba la llegada del Mesías y la que motivó que se embarcaran hacia Belén.
El segundo alineamiento se produjo el seis de Octubre, para esa fecha, los Magos debieron estar ya en pleno viaje hacia el lugar del nacimiento. Esto además, debió confirmar el suceso.
El quince de Diciembre se produjo la tercera alineación, ya para esa fecha, los Magos estarían por llegar a Belén.
De esta manera, Jesús habría nacido entre los años seis y siete AC. El error se debe probablemente a una falla en el cálculo que hizo el monje Dionisio el Exiguo al elaborar el calendario. Cabe agregar que la unión de estos planetas en Piscis se da una vez cada ochocientos años, lo cual resalta todavía más su importancia.
El enigma se ha resuelto finalmente. La Estrella de Belén fue seguramente la conjunción de los planetas Júpiter y Saturno en el año siete AC.

Mariano Andrés Peter, coordinador del Observatorio de Oro Verde  –  AEA

Temas relacionados:

http://www.astroentrerios.com.ar/site/index.php?option=com_content&task=view&id=67&Itemid=66

http://www.astroentrerios.com.ar/site/index.php?option=com_content&task=view&id=76&Itemid=70

http://www.astroentrerios.com.ar/site/index.php?option=com_content&task=view&id=132&Itemid=70

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.