El último de los grandes observatorios lanzados por la agencia espacial concluye así 16 años de exploración del universo.
El telescopio espacial Spitzer lleva 16 años observando el universo. Hoy el aparato dejará de hacerlo. La NASA transmitirá sus últimos datos al centro de control de la misión desde donde se apagará la nave espacial. Su legado científico seguirá vivo a través del Archivo de Datos de Spitzer.
Se acaba así una misión que comenzó con su lanzamiento el 23 de agosto del 2003 desde el Centro Espacial Kennedy en Estados Unidos. Fue el último de los cuatro grandes telescopios que la agencia espacial ha puesto en órbita, cada uno encargado de observar el universo con un tipo diferente de luz. Los otros tres grandes observatorios que completan la lista son el telescopio espacial Hubble , el observatorio de rayos gamma Compton y el observatorio de rayos X Chandra.
Spitzer, nombrado así en honor al astrónomo Lyman Spitzer , estuvo diseñado para detectar radiación infrarroja. Al ser principalmente radiación de calor permitió a los científicos examinar regiones ocultas para los telescopios ópticos.
Los ojos infrarrojos de Spitzer permitieron a los astrónomos ver objetos que no emitían mucha luz por encontrarse lejos o por ser fríos como en el caso de las enanas marrones (estrellas fallidas), exoplanetas y moléculas orgánicas que pueden guardar el secreto de la vida en otros planetas.
Uno de los descubrimientos más impresionantes de Spitzer supuso ampliar de tres a siete los planetas rocosos del tamaño de la Tierra que orbitan una pequeña y débil estrella llamada TRAPPIST-1.El conjunto se astros supone uno de los sistemas planetarios mejor estudiados, además del nuestro.
Gracias a su tecnología fue el primer telescopio en ver la luz de un planeta fuera de nuestro sistema solar, que solo se había logrado de manera indirecta hasta la fecha. También fue el primero en entregar informes meteorológicos de exoplanetas cuando en 2007 permitió realizar un mapa de la superficie del gigante gaseoso HD 189733b, donde mostraba sus variaciones de temperatura.
Spitzer también ha realizado importantes hallazgos sobre cometas, estrellas y galaxias lejanas. Si bien es casi imposible estudiarlas todas, el telescopio permitió crear grandes catálogos de galaxias que representan diferentes sectores del universo donde se encuentrar algunas de las galaxias más distantes que conocemos. Su formación estaría cercana a los inicios del universo.
Con más de 8.700 artículos publicados basados en los descubrimientos de Spitzer, el telescopio ha realizado descubrimientos mucho más allá de lo que la imaginación de sus diseñadores pudo haber abarcado en un inicio. Muchos de estos avances se estudiarán con mayor precisión con el próximo telescopio espacial James Webb, que se lanzará en 2021 y será aproximadamente 1.000 veces más potente.
Fuente: La Vanguardia