Los astrónomos creen que los asteroides, como los planetas, se formaron en el sistema solar primitivo por la aglomeración gradual de partículas más pequeñas. Pero en el caso de los asteroides su crecimiento fue interrumpido por colisiones que les hicieron fragmentarse en lugar de unirse a los planetas.
Esta es una hipótesis que los astrónomos están tratando de probar mediante la recopilación de nuevos datos. Su trabajo tiene algunas repercusiones inmediatas: la NASA está planeando la misión Asteroid Redirect Mission (ARM) entre los próximos vuelos espaciales tripulados de Estados Unidos. La comprensión de los orígenes de los tamaños de los asteroides – y la identificación de un buen candidato para ser para ser atrapado por astronautas – son los objetivos principales de Estados Unidos.
La tasa de descubrimiento de asteroides y cometas ha aumentado en los últimos años gracias a la nueva tecnología de detección. El Sistema Solar está lleno de actividad, con pequeños objetos en desarrollo (incluyendo los asteroides) cuyas órbitas y tamaños están conformadas por las interacciones gravitacionales con los planetas gigantes, y también por otras fuerzas como las colisiones y los efectos de la radiación. Los efectos de la radiación incluyen la evaporación del hielo de agua La fuerte rotación fragmenta más asteroides que las colisiones u otras sustancias volátiles, el diferencial de expansión térmica, y la presión de la radiación – y todo ello es crítico al tratar la cuestión de los tamaños de los asteroides. Debido a que los asteroides son de forma irregular, la presión de la luz solar incidente, y también el efecto de su propia radiación hacia el exterior, puede hacer que giren y, cuando el giro es lo suficientemente rápido, se rompan. Una «interrupción catastrófica» se define como la ruptura de un asteroide en La fuerte rotación fragmenta más asteroides que las colisiones u otras sustancias volátiles, el diferencial de expansión térmica, y la presión de la radiación – y todo ello es crítico al tratar la cuestión de los tamaños de los asteroides. Debido a que los asteroides son de forma irregular, la presión de la luz solar incidente, y también el efecto de su propia radiación hacia el exterior, puede hacer que giren y, cuando el giro es lo suficientemente rápido, se rompan.
Una «interrupción catastrófica» se define como la ruptura de un asteroide en fragmentos menores a la mitad de la masa original. Tradicionalmente se ha pensado que los pequeños asteroides son resultado de las colisiones entre un cuerpo matriz y otro proyectil más pequeño, pero estos eventos parecen ser muy raros, tanto a partir de observaciones como de modelos más nuevos. Recientemente se ha reforzado la atención a los mecanismos de ruptura no relacionados con un choque, como los debLa fuerte rotación fragmenta más asteroides que las colisiones bidos a los efectos de la radiación, especialmente para los asteroides de unos cientos de metros de diámetro.
LA ROTACIÓN
El astrónomo del CfA (Center for Astrophysics) de la Universidad de Harvard Tim Spahr y sus colegas han completado una nueva serie de cálculos para las fragmentaciones catastróficas de los asteroides del cinturón principal, basándose en los nuevos censos de pequeños asteroides. En su opinión, para asteroides de alrededor de cien metros de diámetro, las colisioLa fuerte rotación fragmenta más asteroides que las colisiones no son la causa principal de su ruptura, sino que se debe más habitualmente a la rotación rápida. Por otra parte, debido a que la tasa de colisiones depende del número y tamaño de los objetos, y no de la rotación, sus resultados están en desacuerdo con los modelos anteriores sobre pequeños asteroides producidos por colisión.
Fuente: Europa Press