Fotografían una estrella vampiro

Astrónomos obtuvieron las mejores fotografías que se conocen de una estrella vampiro que ha logrado succionar gran parte del material de su compañera estelar. Combinando la luz captada por cuatro telescopios en el Observatorio Paranal de ESO, en la Región de Antofagasta (Chile), lograron crear un telescopio virtual de 130 metros de diámetro, con una visión 50 veces más nítida que la del Telescopio Espacial Hubble NASA/ESA. Sorprendentemente, los nuevos resultados muestran que la transferencia de masa de una estrella a la otra en este sistema binario es más suave de lo esperado.

“Ahora podemos combinar la luz de cuatro telescopios del VLT y crear imágenes súper nítidas mucho más rápido que antes”, dice Nicolas Blind (IPAG, Grenoble, Francia), autor principal del artículo que presenta los resultados. “Las imágenes son tan nítidas que no sólo podemos observar las estrellas que orbitan entre sí, sino también medir el tamaño de la estrella más grande”.
Los astrónomos observaron [1] el inusual sistema SS Leporis en la constelación de Lepus, que contiene dos estrellas que orbitan una en torno a la otra en 260 días. Las estrellas están separadas por una distancia un poco mayor que la que existe entre el Sol y la Tierra, y la más grande y fría de ellas mide un cuarto de esta distancia –esto equivale aproximadamente a la órbita de Mercurio. Debido su cercanía, la compañera más pequeña y caliente ya ha succionado casi la mitad de la masa de su compañera. “Sabíamos que esta estrella doble era inusual, y que el material estaba fluyendo de una estrella a la otra”, dice Henri Boffin de ESO, co-autor del estudio. “Sin embargo, lo que descubrimos es que la forma en que probablemente ocurrió la transferencia de masa es completamente diferente a los modelos que existen de este proceso. La  ´mordida` de la estrella vampiro es muy suave pero altamente efectiva”.

Astrónomos obtuvieron las mejores fotografías que se conocen de una estrella vampiro que ha logrado succionar gran parte del material de su compañera estelar. Combinando la luz captada por cuatro telescopios en el Observatorio Paranal de ESO, en la Región de Antofagasta (Chile), lograron crear un telescopio virtual de 130 metros de diámetro, con una visión 50 veces más nítida que la del Telescopio Espacial Hubble NASA/ESA. Sorprendentemente, los nuevos resultados muestran que la transferencia de masa de una estrella a la otra en este sistema binario es más suave de lo esperado.

“Ahora podemos combinar la luz de cuatro telescopios del VLT y crear imágenes súper nítidas mucho más rápido que antes”, dice Nicolas Blind (IPAG, Grenoble, Francia), autor principal del artículo que presenta los resultados. “Las imágenes son tan nítidas que no sólo podemos observar las estrellas que orbitan entre sí, sino también medir el tamaño de la estrella más grande”.
Los astrónomos observaron [1] el inusual sistema SS Leporis en la constelación de Lepus, que contiene dos estrellas que orbitan una en torno a la otra en 260 días. Las estrellas están separadas por una distancia un poco mayor que la que existe entre el Sol y la Tierra, y la más grande y fría de ellas mide un cuarto de esta distancia –esto equivale aproximadamente a la órbita de Mercurio. Debido su cercanía, la compañera más pequeña y caliente ya ha succionado casi la mitad de la masa de su compañera. “Sabíamos que esta estrella doble era inusual, y que el material estaba fluyendo de una estrella a la otra”, dice Henri Boffin de ESO, co-autor del estudio. “Sin embargo, lo que descubrimos es que la forma en que probablemente ocurrió la transferencia de masa es completamente diferente a los modelos que existen de este proceso. La  ´mordida` de la estrella vampiro es muy suave pero altamente efectiva”.

Las nuevas observaciones son lo bastante nítidas como para mostrar que la estrella gigante es más pequeña de lo que se pensaba previamente, lo que hace aún más difícil explicar cómo la gigante roja transfirió materia hacia su compañera. Los astrónomos ahora piensan que la materia, en lugar de fluir como un torrente desde una estrella hacia la otra, fue expulsada de la estrella gigante en forma de viento estelar para luego ser capturada por la compañera más caliente.
“Estas observaciones han demostrado las nuevas capacidades del Interferómetro del Very Large Telescope para tomar imágenes instantáneas. Con esto se pavimenta el camino para muchos estudios fascinantes que vendrán sobre estrellas dobles que interactúan”, concluye el co-autor Jean-Philippe Berger de ESO.

Notas
[1] Las fotografías fueron creadas a partir de observaciones realizadas con el Interferómetro del Very Large Telescope (VLTI) en el Observatorio Paranal de ESO, empleando los cuatro Telescopios Auxiliares de 1,8 metros. La luz de estos telescopios fue combinada por el instrumento PIONIER (ver noticia anterior en inglés).
PIONIER, desarrollado en LAOG/IPAG en Grenoble, Francia, es un instrumento visitante en el Observatorio Paranal. PIONIER es financiado por la Universidad Joseph Fourier, IPAG, INSU-CNRS (ASHRA-PNPS-PNP) ANR 2G-VLTI y ANR Exozodi. IPAG es parte del Observatorio de Grenoble (OSUG).
Los ingenieros del VLTI tuvieron que controlar la distancia que recorrió la luz desde los telescopios, ampliamente separados entre sí, con una precisión de alrededor de un centésimo del grosor de una hebra de cabello humano. Una vez que la luz entró a PIONIER, ésta fue dirigida al corazón del instrumento: un notable circuito óptico, más pequeño que una tarjeta de crédito, el que finalmente combinó las ondas de luz desde los distintos telescopios con una gran precisión, haciendo posible la interferencia. El poder de resolución del conjunto de telescopios no es comparable al de cada Telescopio Auxiliar de 1,8 metros, ya que combinados equivalen a un “telescopio virtual” mucho mayor, de unos 130 metros de ancho, limitado sólo por la distancia máxima donde se pueden ubicar los telescopios.
La resolución del Telescopio Espacial Hubble NASA/ESA es de aproximadamente 50 milésimas de segundos de arco mientras que la resolución alcanzable con el VLTI es de alrededor una milésima de segundo de arco, correspondiente al tamaño aparente de un astronauta en la superficie de la Luna, visto desde la Tierra.

Información adicional
Esta investigación fue presentada en el artículo científico “An incisive look at the symbiotic star SS Leporis — Milli-arcsecond imaging with PIONIER/VLTI”, por N. Blind et al. en la revista Astronomy & Astrophysics.

Fuente: ESO

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