Investigadores españoles confirman la hipótesis de que el violento impacto acidificó los océanos.
n estudio internacional, con la participación de la Universidad de Zaragoza junto a científicos de EE.UU., Gran Bretaña y Alemania, demuestra, por primera vez, que el impacto de un asteroide en la península mexicana de Yucatán hace 66 millones de años provocó la acidificación de los océanos, contribuyendo a la última gran extinción en masa. Estos resultados ratifican que la extinción marina fue provocada por los gases emitidos por dicho impacto y no el cese de la fotosíntesis por la oscuridad generada por la nube de polvo resultante, como se creía hasta ahora.