¿Quieren ver un planeta extrasolar? Pues ahí lo tienen. Con ustedes, el superjúpiter Kappa Andromedae b.

¿Que no lo ven? Es esa mancha blanquecina situada a la izquierda del disco central oscuro. Puede que no les llame la atención, pero ésta es una de las pocas veces que podemos ver un planeta directamente, sin necesidad de recurrir a métodos indirectos como el de la velocidad radial o el tránsito. Nada más y nada menos que otro mundo situado a 170 años luz y somos capaces de observarlo con nuestros propios ojos (es un decir, ya me entienden). ¿Y cómo es posible? Pues gracias a que Kappa Andromedae b está situado a unos 8300 millones de kilómetros de su estrella y a que es un planeta joven, con una temperatura que ronda los 1500º C. Tan joven que se cree que su edad debe estar entre los 20 y 50 millones de años. Y lo hemos podido ver gracias al telescopio japonés Subaru, en Mauna Kea.
