La India prepara el lanzamiento de su primer satélite militar. Desde una órbita geoestacionaria el artefacto realizará observaciones de la superficie terrestre y asegurará las comunicaciones de su Armada. De este modo la India será el cuarto país cuyas Fuerzas Navales dispkndrán de una agrupación de satélite. ¿Moda o necesidad?
La Armada india ha sido siempre una de las más poderosas de la región asiática del Pacífico. Para estar a la altura de las exigencias de la época sólo le faltaba la “componente espacial”. Hoy el primer elemento de la misma está listo para el despegue que se producirá en el curso de un mes.
Las misiones del nuevo satélite serán observar la superficie de la Tierra y asegurar la comunicación contínua vía satélite para la flota de la India. Garantizará un crecimiento en flecha de las posibilidades de la flota india: en adelante la Armada podrá intercambiar grandes volúmenes de información en tiempo real.
En teoría, el lanzamiento del satélite militar puede marcar el primer paso en la implementación de una red informática completa que permita coordinar las acciones de todas las unidades de la Marina desde un solo puesto de mando asegurando la indicación de objetivos y su distribución a distancia. Para crear un sistema plenamente válido de información e inteligencia habrá que disponer de satélites en órbita baja, aviones de patrulla y aeronaves no tripuladas que aseguren una adecuada cobertura del área requerida. (Como avión de reconocimiento marítimo seguramente será seleccionado el P-8I norteamericano. La India aumentará sus compras de aparatos no tripulados de fabricación israelí Heron и Searcher Mark II).
Hoy solamente EEUU y la OTAN en conjunto cuentan con el surtido completo de recursos correspondientes. Rusia, Japón y hasta cierto punto China tienen el potencial para conformar tal sistema en plazos razonables. El lanzamiento del satélite indio implicará el aumento de los países del “club de élite”, pero pasará tiempo antes de que estos recursos se incorporen a la práctica cotidiana de la Armada india.
La India prepara el lanzamiento de su primer satélite militar. Desde una órbita geoestacionaria el artefacto realizará observaciones de la superficie terrestre y asegurará las comunicaciones de su Armada. De este modo la India será el cuarto país cuyas Fuerzas Navales dispkndrán de una agrupación de satélite. ¿Moda o necesidad?
La Armada india ha sido siempre una de las más poderosas de la región asiática del Pacífico. Para estar a la altura de las exigencias de la época sólo le faltaba la “componente espacial”. Hoy el primer elemento de la misma está listo para el despegue que se producirá en el curso de un mes.
Las misiones del nuevo satélite serán observar la superficie de la Tierra y asegurar la comunicación contínua vía satélite para la flota de la India. Garantizará un crecimiento en flecha de las posibilidades de la flota india: en adelante la Armada podrá intercambiar grandes volúmenes de información en tiempo real.
En teoría, el lanzamiento del satélite militar puede marcar el primer paso en la implementación de una red informática completa que permita coordinar las acciones de todas las unidades de la Marina desde un solo puesto de mando asegurando la indicación de objetivos y su distribución a distancia. Para crear un sistema plenamente válido de información e inteligencia habrá que disponer de satélites en órbita baja, aviones de patrulla y aeronaves no tripuladas que aseguren una adecuada cobertura del área requerida. (Como avión de reconocimiento marítimo seguramente será seleccionado el P-8I norteamericano. La India aumentará sus compras de aparatos no tripulados de fabricación israelí Heron и Searcher Mark II).
Hoy solamente EEUU y la OTAN en conjunto cuentan con el surtido completo de recursos correspondientes. Rusia, Japón y hasta cierto punto China tienen el potencial para conformar tal sistema en plazos razonables. El lanzamiento del satélite indio implicará el aumento de los países del “club de élite”, pero pasará tiempo antes de que estos recursos se incorporen a la práctica cotidiana de la Armada india.
¿CUÁL SERÁ EL PORTADOR?
La ubicación de un satélite en la órbita geoestacionaria es una tarea de gran responsabilidad y para cumplirla, al día de hoy la India no dispone de un portador lo suficientemente fiable. En teoría la colocación en órbita puede ser encargada al cohete GSLV, pero las estadísticas de sus lanzamientos – de las siete misiones cuatro fracasaron y una no se ejecutó del todo – hacen duda que los militares indios confien su primer aparato a un portador deficiente.
Las autoridades indias todavía no han comunicado oficialmente dónde y con qué cohete portador será colocado en órbita el satélite, pero no hay muchas opciones, siendo la rusa la más probable. El satélite colocado en órbita geoestacionaria el satélite quedará posicionado exactamente sobre el ecuador, y esto ofrecerá ventajas adicionales a la India porque serán ideales las condiciones para las observaciones sobre el Océano Índico, que es lo que más les interesa a los militaresa de ese país.
AMBIENTE DE FONDO
Los preparativos para el lanzamiento no se realizan en un vacío: la región asiática del Pacífico es escenario de una competencia cada día más reñida de las grandes potencias. Aparte del incremento de los recursos militares de China y del progreso de la India en este sentido, hay que destacar el crecimiento del potencial de Japón y la concentración del potencial militar de EEUU en el área. Para 2020 en la región asiática del Pacífico estará ubicado hasta un 60 % de los buques de guerra de la Marina norteamericana incluyendo seis grupos multifuncionales de portaviones.
El proceso de reorientación de EEUU hacia la región asiática del Pacífico no empezó ayer y el cambio de prioridades lo confirman, entre otras, las medidas de carácter organizativo y en particular la disolución de la Segunda Flota de la Marina de Guerra estadounidense que historicamente respondía por el teatro de operaciones en el Atlántico: la reducción de la flota del Atlántico hizo innecesaria esta unidad de mando.
En los últimos tiempos Leon Panetta, Secretario de Defensa de EEUU reiteró en dos ocasiones el propósito de su país de trasladar gran parte de la Armada estadounidense a la región asiática del Pacífico. Esta dirección está siendo priorizada por el pertrechamiento con sofisticados equipos. En el Pacífico se encuentra hasta la mitad de los cazas F-22 listos para combatir, los primeros F-35 serán destinados a esa área y el nuevo portaviones “Gerald R. Ford” será adscrito a la flota norteamericana del Pacífico.
La estrategia de EEUU es clara: ir incrementando fuerzas en pos del crecimiento del potencial de su principal contrincante geopolítico que hoy es, sin duda, China. Al aplicarla EEUU trata de apoyarse en los competidores tradicionales de Pekin. Después de Japón, Corea del Sur, Filipinas, Australia y Nueva Zelanda, EEUU procura integrar en esta estrategia a la India que se mantiene marginado y también a Vietnam, su enemigo de antes.
Durante su visita a Delhi Panetta declaró que la India y EEUU deben realizar maniobras conjuntas más complicadas y con mayor frecuencia. Los observadores destacan que esta idea fue expresada en Delhi el mismo día cuando el presidente ruso Vladímir Putin quien se encuentra de visita en China, abogó por el desarrollo de la cooperación militar con el gigante asiático.
A EEUU no le faltarán oportunidades de armar una coalición antichina porque los países del área tradicionalmente le tienen ojeriza a Pekin. Pero existen dos posibles obstáculos en este camino. Históricamente hablando, a sus vecinos, Tokio produce tanto rescelos como Pekin, mientras que la incorporación de la India implica hacer concesiones considerables a este país y tener en consideración sus intereses. La India es un jugador demasiado serio para conformarse con el papel de socio menor. El proyectado lanzamiento de su primer satélite militar confirmar su ambiciones y potencialidad.
Por Iliá Krámnik / La Voz de Rusia / Moscú