Se basan en la investigación espacial para avanzar en la detección del Alzheimer

La Agencia Espacial Europea se ha hecho eco recientemente, a través de un artículo publicado en su su web, de los resultados de una investigación en la que participa la Universidad de Castillas-La Mancha (UCLM) y que tiene como objetivo avanzar en la detección precoz del Alzheimer a través de un nuevo sistema de procesamiento de las imágenes de las resonancias magnéticas que tiene su origen en software utilizado en investigación espacial.

   Se trata de un ejemplo de transferencia de la investigación espacial a otros terrenos, en este caso el de la salud. En concreto, según ha explicado la UPNA en un comunicado, técnicos de la empresa española Elecnor Deimos se han basado en su larga experiencia en el desarrollo de software para el satélite Envisat, de la Agencia Espacial Europea, para crear la herramienta AlzTool 3D Slicer, que utiliza imágenes de resonancia del cerebro de la misma manera que se hace para interpretar los datos que envían los satélites.

   Este proyecto, que ha contado con la financiación del Plan Avanza del Ministerio de Industria, fue presentado hace un par de años en el Campus de Tudela, con motivo de una reunión de trabajo. En el proyecto participan la Universidad de Castilla La Mancha, Universidad de Zaragoza, Departamento de Inteligencia Artificial de la UNED, Universidad Politécnica de Madrid-Centro de Tecnología Biomédica y Universidad Pública de Navarra.

La Agencia Espacial Europea se ha hecho eco recientemente, a través de un artículo publicado en su su web, de los resultados de una investigación en la que participa la Universidad de Castillas-La Mancha (UCLM) y que tiene como objetivo avanzar en la detección precoz del Alzheimer a través de un nuevo sistema de procesamiento de las imágenes de las resonancias magnéticas que tiene su origen en software utilizado en investigación espacial.

   Se trata de un ejemplo de transferencia de la investigación espacial a otros terrenos, en este caso el de la salud. En concreto, según ha explicado la UPNA en un comunicado, técnicos de la empresa española Elecnor Deimos se han basado en su larga experiencia en el desarrollo de software para el satélite Envisat, de la Agencia Espacial Europea, para crear la herramienta AlzTool 3D Slicer, que utiliza imágenes de resonancia del cerebro de la misma manera que se hace para interpretar los datos que envían los satélites.

   Este proyecto, que ha contado con la financiación del Plan Avanza del Ministerio de Industria, fue presentado hace un par de años en el Campus de Tudela, con motivo de una reunión de trabajo. En el proyecto participan la Universidad de Castilla La Mancha, Universidad de Zaragoza, Departamento de Inteligencia Artificial de la UNED, Universidad Politécnica de Madrid-Centro de Tecnología Biomédica y Universidad Pública de Navarra.

Los centros hospitalarios asociados son la Unidad de Ciencias Neurológicas del Hospital Ramón y Cajal de Madrid, la Clínica Universidad de Navarra y el Servicio de Salud de Castilla La Mancha.

   La participación de la UPNA en esta investigación se ha centrado en el reconocimiento morfológico de las zonas del cerebro que se relacionan con la memoria fijando los límites de las distintas áreas de la corteza temporal asociadas a las imágenes que se obtienen en la resonancia magnética. Este conocimiento más detallado de las zonas afectadas permite incrementar la exactitud de la localización y magnitud de la pérdida volumétrica.

   En la parte que corresponde a la UPNA, el proyecto está liderado por Ana Insausti Serrano, profesora de Anatomía y Embriología y subdirectora de la Escuela de Estudios Sanitarios. Además, ha contado con la colaboración de Elisabeth Pais Sousa, titulada de la primera promoción de la Diplomatura de Fisioterapia del Campus de Tudela, y de Amparo Santamaría Torroba, profesora del Área de Fisiología.

Fuente: Europa Press

El telescopio James Webb se pone a punto para suceder al Hubble

El telescopio espacial James Webb (JWST) se pone a punto para su lanzamiento, que está programado para 2018. El que será el telescopio más potente lanzado al espacio, ya cuenta con la mayor parte de sus espejos y dos de los instrumentos que le permitirán explorar, como nunca antes se ha explorado, el Universo.

   JWST es un gran telescopio espacial de infrarrojos que, se espera, que encuentre primeras galaxias que se formaron en el Universo temprano, conectando el Big Bang con la Vía Láctea. Gracias a sus innovadoras tecnologías, Webb será mirar a través de las nubes de polvo para ver estrellas que forman los sistemas planetarios y podrá observar objetos tenues junto a otros más brillantes y que, con sistemas fuera del rango infrarrojo, no se podrían observar.

   El telescopio contará con un gran espejo, 6,5 metros de diámetro y un parasol del tamaño de una pista de tenis. Estas piezas no caben totalmente abiertas en un cohete, por lo que se podrán doblar y abrir una vez que JWST esté en el espacio exterior. Concretamente, se situará en una órbita alrededor de 1.500.000 kilómetros de la Tierra.

El telescopio espacial James Webb (JWST) se pone a punto para su lanzamiento, que está programado para 2018. El que será el telescopio más potente lanzado al espacio, ya cuenta con la mayor parte de sus espejos y dos de los instrumentos que le permitirán explorar, como nunca antes se ha explorado, el Universo.

   JWST es un gran telescopio espacial de infrarrojos que, se espera, que encuentre primeras galaxias que se formaron en el Universo temprano, conectando el Big Bang con la Vía Láctea. Gracias a sus innovadoras tecnologías, Webb será mirar a través de las nubes de polvo para ver estrellas que forman los sistemas planetarios y podrá observar objetos tenues junto a otros más brillantes y que, con sistemas fuera del rango infrarrojo, no se podrían observar.

   El telescopio contará con un gran espejo, 6,5 metros de diámetro y un parasol del tamaño de una pista de tenis. Estas piezas no caben totalmente abiertas en un cohete, por lo que se podrán doblar y abrir una vez que JWST esté en el espacio exterior. Concretamente, se situará en una órbita alrededor de 1.500.000 kilómetros de la Tierra.

España ha formado parte del desarrollo del JWST, ya que ha colaborado en la construcción del espectrógrafo MIRI, que será capaz de observar a través de las densas capas de polvo que rodean a las regiones de formación de estrellas, de estudiar las galaxias en los comienzos del Universo y de analizar nuevos planetas en formación y la composición del medio interestelar.

   Por su parte, la Universidad de Arizona se ha encargado de la cámara de infrarrojo cercano (NIRCam), programada para observar los objetos más distantes del Universo, proporcionar imágenes de las primeras galaxias jamás formadas y ayudar a explorar planetas alrededor de estrellas distantes.

   Este proyecto, en el que participan la NASA, la Agencia Espacial Europea (ESA) y la Agencia Espacial de Canadá, estuvo en peligro en el año 2011, cuando fue examinado para su cancelación por parte del Congreso de Estados Unidos. Entonces, ya se habían gastado 3.000 millones de dólares y más del 75 por ciento de su hardware estaba ya en producción o en fase de pruebas.

   Finalmente, el Congreso revocó los planes para cancelar el proyecto y en su lugar se puso un tope de financiación adicional para completar el proyecto en 8.000 millones de dólares.

Fuente: Europa Press

Dos hermanos gemelos, conejillos de indias de la NASA

Los astronautas hermanos gemelos, Mark y Scott Kelly serán los conejillos de indias de la NASA para estudiar los efectos del espacio en el cuerpo humano. Mark, ya retirado, permanecerá en la Tierra, mientras que su hermano Scott pasará un año completo (a partir de 2015) en la Estación Espacial Internacional (ISS).

   La NASA ha explicado que este proyecto se centra en la toma de muestras de sangre que se tomarán a ambos hermanos y que se recogerán antes de que Scott viaje a la ISS, durante su estancia allí y una vez que regrese a la Tierra. "Esto permitirá comparar dos cuerpos que funcionan igual en diferentes ambientes", ha indicado la agencia espacial.

   El experimento de los gemelos es parte de una iniciativa más amplia para comprender mejor los efectos que tienen en el cuerpo humano la largas estancias en la ingravidez.

Los astronautas hermanos gemelos, Mark y Scott Kelly serán los conejillos de indias de la NASA para estudiar los efectos del espacio en el cuerpo humano. Mark, ya retirado, permanecerá en la Tierra, mientras que su hermano Scott pasará un año completo (a partir de 2015) en la Estación Espacial Internacional (ISS).

   La NASA ha explicado que este proyecto se centra en la toma de muestras de sangre que se tomarán a ambos hermanos y que se recogerán antes de que Scott viaje a la ISS, durante su estancia allí y una vez que regrese a la Tierra. "Esto permitirá comparar dos cuerpos que funcionan igual en diferentes ambientes", ha indicado la agencia espacial.

   El experimento de los gemelos es parte de una iniciativa más amplia para comprender mejor los efectos que tienen en el cuerpo humano la largas estancias en la ingravidez.

La NASA, junto a 15 socios internacionales, están utilizando la estación espacial para estudios sobre el tema. Los resultados se utilizarán para mejorar la protección de los astronautas en misiones a lugares como Marte o la Luna en el futuro.

   A sus 49 años de edad, los gemelos son los únicos hermanos que han volado en el espacio. Scott ha participado en dos vuelos de los transbordadores espaciales y Mark ha volado en cuatro ocasiones. Además, este último es conocido por su mujer, la congresista Gabrielle Giffords, que fue herida en un tiroteo en 2011 durante un evento público.

   Actualmente la NASA está pidiendo propuestas de experimentos que se pueden realizar con estos hermanos. El proyecto, al que han llamado "Efectos diferenciales sobre astronautas gemelos homocigóticos asociado con diferencias en la exposición a factores vuelo espacial", se encuentra explicado en la página web de la agencia espacial (www.nasa.gov) y allí se pueden exponer las ideas hasta el próximo 17 de septiembre.

Fuente: Europa Press

La misión Juno de la NASA ya está a medio camino de su destino: Júpiter

 

 La nave espacial Juno de la NASA está a medio camino a Júpiter. Este lunes alcanzaba el hito, las 9,464 unidades astronómicas, a las 14.25 horas (hora española) y, ahora, el equipo está ya a la espera del día en que la nave alcance la órbita del planeta más masivo del Sistema Solar.

   Las unidades astronómicas (UA) son una unidad de medida utilizada por los ingenieros espaciales y científicos cuando se habla de distancias enormes. A menudo se utilizan en exploraciones espaciales por el Sistema Solar, cuando las naves tienen que viajar a lugares lejanos.

   Una UA se basa en la distancia entre la Tierra y el Sol, que es de 149.600.000 kilómetros. Las 9,464 unidades astronómicas que Juno ya ha viajado es equivalente a 1.415 millones de kilómetros.

 

 La nave espacial Juno de la NASA está a medio camino a Júpiter. Este lunes alcanzaba el hito, las 9,464 unidades astronómicas, a las 14.25 horas (hora española) y, ahora, el equipo está ya a la espera del día en que la nave alcance la órbita del planeta más masivo del Sistema Solar.

   Las unidades astronómicas (UA) son una unidad de medida utilizada por los ingenieros espaciales y científicos cuando se habla de distancias enormes. A menudo se utilizan en exploraciones espaciales por el Sistema Solar, cuando las naves tienen que viajar a lugares lejanos.

   Una UA se basa en la distancia entre la Tierra y el Sol, que es de 149.600.000 kilómetros. Las 9,464 unidades astronómicas que Juno ya ha viajado es equivalente a 1.415 millones de kilómetros.

El siguiente hito en el viaje de casi cinco años a Júpiter se producirá este mes de octubre, cuando se encuentro a unos 559 kilómetros de la Tierra y aumente su velocidad a unos 7,3 kilómetros por segundo, según ha explicado el encargado de la misión, Rick Nybakken. A partir de ahí, la nave no se detendrá hasta llegar a Júpiter, el 4 de julio de 2016.

   Juno fue lanzada el 5 de agosto de 2011. Una vez en órbita alrededor de Júpiter, la nave espacial dará 33 vueltas al planeta, de polo a polo, y usará su colección de ocho instrumentos científicos para sondear debajo de la cubierta de nubes que ocultan al gigante de gas.

   El equipo científico de Juno aprenderá acerca de los orígenes de Júpiter, su estructura, su atmósfera y su magnetosfera. Además, Juno buscará un potencial núcleo planetario sólido

Fuente: Europa Press

Estados Unidos no puede permitirse la vigilancia espacial

La Fuerza Aérea de Estados Unidos tiene previsto suspender, a partir del mes de octubre, la actividad de su programa de seguimiento de satélites y otros objetos en órbita, como consecuencia de la reducción de presupuesto.

   Desde 1961, el país norteamericano mantiene en marcha un sistema conocido como 'Space Fence' que permite vigilar cualquier objeto en el espacio. Los aparatos que están actualmente en el espacio están obsoletos, según ha señalado el general William Shelton, y, aunque Estados Unidos cuenta con sistemas mejorados, el programa cuesta miles de millones de dólares que deberían haberse incluido ya en los presupuestos de 2012 y 2013.

   Shelton ha indicado el departamento militar estadounidense ha desarrollado varias alternativas para los recortes presupuestarios que se pueden dar durante la próxima década. Algunos de ello están siendo estudiados por el Pentágono.

La Fuerza Aérea de Estados Unidos tiene previsto suspender, a partir del mes de octubre, la actividad de su programa de seguimiento de satélites y otros objetos en órbita, como consecuencia de la reducción de presupuesto.

   Desde 1961, el país norteamericano mantiene en marcha un sistema conocido como 'Space Fence' que permite vigilar cualquier objeto en el espacio. Los aparatos que están actualmente en el espacio están obsoletos, según ha señalado el general William Shelton, y, aunque Estados Unidos cuenta con sistemas mejorados, el programa cuesta miles de millones de dólares que deberían haberse incluido ya en los presupuestos de 2012 y 2013.

   Shelton ha indicado el departamento militar estadounidense ha desarrollado varias alternativas para los recortes presupuestarios que se pueden dar durante la próxima década. Algunos de ello están siendo estudiados por el Pentágono.

El programa 'Space Fence' consta de tres transmisores y seis receptores ubicados en diferentes partes del sur de Estados Unidos. El 40 por ciento de la información del espacio llega a la Tierra por medio de este sistema.

   Según los expertos, 'Space Fence' es capaz de realizar un seguimiento de los objetos que están a una altura de más de 24 kilómetros, mientras los otros sistemas pueden llevar a cabo la investigación solo a unos pocos kilómetros. Además, el sistema funciona continuamente y es capaz de detectar cualquier objeto.

   Shelton ha apuntadi que con la desactivación de este operativo el Comando Espacial de la Fuerza Aérea podría ahorrar hasta 14 millones de dólares anuales.

Fuente: Europa Press