Traducción del texto aparecido en la página 7 de la edición de Agosto 2018 de “The Lunar Observer”.
Aprovechando la cercanía del terminador, y mientras realizaba observaciones para el Lunar Geological Change Detection Program, contemplé el paisaje en las cercanías de Arago. Más hacia el norte, en la zona no incluida en este dibujo, aparecían en toda su magnificencia los domos Arago Alpha y Arago Beta, lo que era una indicación del buen seeing del momento y un incentivo para aguzar la vista en busca de detalles. Arago C, en el centro de la imagen, es un pequeño cráter de apenas 3 kilómetros de diámetro. Al momento de la observación parecía evidente que era un cráter pequeño por su brillo muy apagado. Sin embargo, proyectaba una sombra muy definida y prolongada (lo que captó mi atención lo suficiente como para realizar una observación detallada), con forma triangular. Buscando la escasa información sobre Arago C a disposición de los aficionados, encontré la página web de the.moon.wikispaces relativa a Arago (https://the-moon.wikispaces.com/Arago) en la que se menciona que Arago C “dos veces dibujado como un montículo por Harold Hill en su libro A Portfolio of Lunar Drawings. En la página 6 Hill dice: “El pequeño objeto situado al noreste de Arago B fue dos veces dibujado como una colina y sin embargo otras veces como un pequeño cráter”. Recordando mi observación, la confusión es plausible, ya que la sombra proyectada por Arago C parece mucho más larga que la que podrían proyectar las paredes de un cráter tan pequeño, además de presentar dicha sombra una forma triangular más cercana a la que proyectaría un pico aislado: “El seeing puede jugarnos malas pasadas con la interpretación y he descubierto que bajo una luz oblicua las brillantes paredes interiores iluminadas por el Sol de pequeños cráteres puede a veces confundirse con colinas”, en palabras de Harold Hill.
A la izquierda, observamos Arago B y Manners, proyectando sombras hacia el oeste y con su interior completamente oscuro. El extremo sur del dibujo está ocupado por las paredes exteriores de Sabine y Ritter, iluminadas en la frontera del terminador. En el centro, ligeramente hacia la izquierda, podemos distinguir lo que en primer momento me pareció un sistema de dorsa, por la apariencia de sombras pronunciadas y partes iluminadas. En la mencionada web se las denomina “Piero Leonardi Arcuate Fractures”. Estas rimas arqueadas son visibles en las imágenes del Lunar Orbiter (Plate 218 del Lunar Orbiter Photographic Atlas of the Monn, Bowker and Hughles, Langley Research Center, 1971) y en las del Lunar Reconaissance Orbiter. Es interesante notar las zonas más brillantes en el suelo de Mare Tranquilitatis que se distinguen en la parte inferior del dibujo, especialmente entre Manners y las rimas arqueadas.