La lluvia de las estrellas fugaces (o lluvias de meteoros), denominada Leónidas, alcanzará su máximo en la noche de este lunes 17 de noviembre.
Este acontecimiento es uno de los más esperados por los aficionados de la astronomía, porque llega a ser un verdadero espectáculo parecido, en ciertos momentos, a los fuegos artificiales.
Las lluvias de estrellas fugaces, de las que se conocen más de 140 al cabo del año, son en realidad, pequeños fragmentos de cometas (rocas y hielo) que entran en la atmósfera de la Tierra.
Lo curioso de la Leónidas, es que los restos que deja el cometa Tempel-Tuttle 1866 I, no están distribuidos en la órbita de forma uniforme. Por eso, hay años en los que la Tierra atraviesa los restos de este cometa y se encuentra con las partículas mayores y en número abundante, mientras que en otras ocasiones la intensidad es algo menor.
Fuente: Europa Press