Imágen captada desde la Provincia de Neuquén
Ayer a las 20:57 hora chilena (00:55 UTC del día 10/05/2013) varias personas captaban con sus teléfonos móviles y cámaras de vídeo una enorme y lenta cantidad de bolas ardiendo en la atmósfera. El evento, ha sido discusión en varios medios de comunicación locales. La mayoría de personas creyó que fue un enorme meteorito desintegrándose en la atmosfera, pero ¿fue esto lo que pasó?
Los meteoritos destacan por su rápida velocidad angular pese a las bajas elevaciones con que podemos verlos en el cielo (a veces menores a 20º). A no ser que este meteorito esté viniendo verticalmente hacia nosotros (o cerca de nosotros), podemos verlo con baja velocidad angular, pero aún así sería difícil confundirlo con un satélite o un trozo de basura espacial reentrando en la atmósfera. Cabe destacar que estos días es visible la “lluvia de estrellas” conocida como Eta Acuáridas, pero la constelación de Acuario no es visible si no hasta las 2 am en cielos chilenos, así que este bólido no corresponde a la lluvia de estrellas como se ha afirmado en los medios.
Por lo tanto, solo con ver las imágenes captadas por las cámaras, podemos determinar que fue chatarra lo que hizo brillar el cielo durante unos segundos.
Imágen captada desde la Provincia de Neuquén
Ayer a las 20:57 hora chilena (00:55 UTC del día 10/05/2013) varias personas captaban con sus teléfonos móviles y cámaras de vídeo una enorme y lenta cantidad de bolas ardiendo en la atmósfera. El evento, ha sido discusión en varios medios de comunicación locales. La mayoría de personas creyó que fue un enorme meteorito desintegrándose en la atmosfera, pero ¿fue esto lo que pasó?
Los meteoritos destacan por su rápida velocidad angular pese a las bajas elevaciones con que podemos verlos en el cielo (a veces menores a 20º). A no ser que este meteorito esté viniendo verticalmente hacia nosotros (o cerca de nosotros), podemos verlo con baja velocidad angular, pero aún así sería difícil confundirlo con un satélite o un trozo de basura espacial reentrando en la atmósfera. Cabe destacar que estos días es visible la “lluvia de estrellas” conocida como Eta Acuáridas, pero la constelación de Acuario no es visible si no hasta las 2 am en cielos chilenos, así que este bólido no corresponde a la lluvia de estrellas como se ha afirmado en los medios.
Por lo tanto, solo con ver las imágenes captadas por las cámaras, podemos determinar que fue chatarra lo que hizo brillar el cielo durante unos segundos.
Pero, ¿qué satélite fue?
Importante: Los que leyeron ayer el artículo pudieron leer que fue el PhoneSat “Bell” el que reingresó en la atmósfera, ya que era el nombre que le correspondía a las órbitas publicadas por la USSTRATCOM. Sin embargo, hoy se ha descubierto que les asignaron mal los nombres a dichas órbitas, y que NO fue el PhoneSat el que reentró en la atmósfera sino la Carga simuladora Cygnus, Por lo que hemos corregido el artículo. Pido disculpas por el malentendido que haya podido provocar.
El pasado 21 de abril, el cohete Antares de Orbital Sciences y la NASA despegó con una carga simuladora de la futura nave Cygnus que se utilizará (junto a la cápsula Dragon de SpaceX) para que EE.UU. envíe carga útil a la Estación Espacial Internacional.
Junto a la carga simuladora, se encontraban 4 cube-sats, que de esos cuatro, tres de ellos eran Phone-Sats, unos mini-satélites construidos a partir de la electrónica que utilizan los móviles con sistema operativo Android de Google.
La misión de estos satélites era mostrar la viabilidad de enviar microprocesadores, cámaras y otros componentes de telefonía móvil al espacio, cosa que ahorraría millones en la construcción de satélites.
Como el cohete Antares colocó la simulación de la cápsula y los cubesats en una órbita extremadamente baja, solamente sería cuestión de semanas para que todos los objetos reentraran en la atmósfera. Algunos PhoneSats lo hicieron hace unas semanas, mientras que la 2º etapa del cohete lo hizo el 1 de mayo.
Lo que se observó en Temuco (y varias localidades a unos 30-50 km a la redonda) fué la reentrada de la masa simuladora de 3.800 Kg. No se envió ninguna carga útil pesada por la órbita extremadamente baja que tenía.
Esto encaja dentro de un margen de 10 minutos dentro de las observaciones de los videoaficionados, por lo que se puede determinar que casi con toda probabilidad se trataba de la carga simuladora, y no de un meteorito desintegrándose.
Fuente: Cosmonoticias